El jarabe de agave es un endulzante natural que se obtiene del corazón del agave o piña. Su perfil de carbohidratos le otorga a este endulzante sus propiedades únicas. La industria del jarabe de agave ofrece un producto con alto contenido de fructosa que proporciona un dulzor muy agradable y un sabor más fuerte que otras opciones, lo que significa que se necesita menos producto para obtener el mismo dulzor que el que brinda el azúcar.
Además, por su naturaleza, el jarabe de agave contiene fructanos, que son cadenas complejas de fructosa que funcionan como fibra prebiótica. La fibra prebiótica tiene un papel muy importante en la dieta diaria, ya que la evidencia demuestra que es el alimento de las bacterias benéficas del colon, y aporta algunos beneficios como: protege el sistema inmunológico, mejora la absorción de vitaminas y minerales, mejora las funciones del sistema respiratorio, entre otros.
Entonces, si estás buscando una alternativa a todos los productos artificiales o refinados, el jarabe de agave es definitivamente el producto que debes probar.
En la década de 1980, se propuso el índice glucémico (IG) como un medio para clasificar los carbohidratos de los alimentos según el efecto que tienen sobre los niveles de glucosa después de la ingestión. En resumen, el índice glucémico mide la rapidez con la que un alimento aumenta el nivel de glucosa en sangre.
En general, los alimentos con un IG bajo aumentan los niveles de glucosa en el cuerpo, mientras que los que tienen un IG alto se digieren más rápidamente y pueden aumentar los niveles de glucosa muy rápido.
No todos los carbohidratos tienen el mismo efecto en el organismo; algunos provocan un aumento muy rápido del azúcar en sangre, mientras que otros actúan más lentamente, lo que permite un nivel de azúcar más constante. El índice glucémico aborda esas diferencias al asignar un número a los alimentos según la rapidez con la que aumentan los niveles de glucosa en sangre, en comparación con la glucosa pura.
La escala de IG va de 0 a 100. La glucosa pura tiene el índice IG más alto y se le asigna un valor de 100. En cambio, el valor del jarabe de agave es 21, esto lo coloca en el rango de productos con bajo índice glucémico.
La velocidad de absorción de la glucosa y la extensión y duración de los altos niveles de glucosa en sangre son la causa de muchos cambios hormonales y metabólicos que pueden afectar la salud o provocar una enfermedad. Las dietas de bajo índice glucémico pueden ser útiles para el mantenimiento del peso, la pérdida de peso e incluso proteger contra enfermedades crónicas y enfermedades cardíacas.
Por ello, ha aumentado el interés por identificar qué alimentos tienen un IG bajo y qué factores afectan al valor del IG del alimento. Sabiendo esto, cada vez más personas eligen el jarabe de agave como una opción segura, saludable y deliciosa para reemplazar el azúcar y otros edulcorantes.
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